Posts by Jes93

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana


    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió.


    Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido.


    Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoíris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos.


    Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentándolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad. Así comprendió que la amaba y quería vivir muchas aventuras a su lado y se entristeció de no poder hacerlo en ese momento pues había pecado en pensamiento, palabra, obra y omisión. "Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa." pensó. Sacudió su cabeza para borrar esos tormentos que lo acechaban, no era el momento de decaer. Tenía que derrotar al monstruo que tenía enfrente, sin darse cuenta de que vivía en sí y que eso lo complicaba todo.


    "Debo dormir", se dijo a si mismo. "El descanso me despejara la mente", se afirmó. Pero no fue así, no podía descansar pensando en que ella estaba sola, esperándolo en algún lugar distante, y decidió seguir con su aventura viajando hacia el este, a través del gran desierto australiano y guiado solamente por la majestuosa y maravillosa Vía Láctea, le costó mucho llegar pues estaba al otro del mundo pero mereció la pena recorrer todo ese camino en busca de su amada. Emprendió su camino con la convicción de que la encontraría, con la voz de su interior como guía.


    Comenzó a meditar y tras entrar en un trance profundo, pudo verla, estaba allí frente a él y su rostro se iluminó, quería abrazarla,pero algo en su interior le impedía poder hacerlo. Se preguntaba si era un amor no correspondido o si el problema radicaba en otra naturaleza.


    Salio del trance y se convenció de que eso no importaba ahora, algún día estarían juntos, que a pesar de la distancia el amor salvaría todas las dificultades que se presentasen, cavando su propia tumba encontró un antiguo papiro, en él había un mapa con una cruz roja gigante que lo hipnotizo en el profundo mar de los secretos, esos secretos que trató de olvidar y de los que jamás se atrevería a hablar. El mapa hipnótico resulto ser un mapa a un tesoro mágico que estaba custodiado por un dragón enorme que escupía gargajos de lava hedionda plegostiosa, lo cual no hacia más que hacerlo más interesante, pues a él de pequeño le gustaba jugar con el Play doh y tenía un gel de moco de gorila.


    Tomó el gel de moco y mientras lo colocaba en su cabello, comenzó a idear un plan para engañar al dragón, habría que hilar muy fino, pues no iba a ser una batalla nada sencilla

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana


    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió.


    Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido.


    Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoíris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos.


    Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentándolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad. Así comprendió que la amaba y quería vivir muchas aventuras a su lado y se entristeció de no poder hacerlo en ese momento pues había pecado en pensamiento, palabra, obra y omisión. "Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa." pensó. Sacudió su cabeza para borrar esos tormentos que lo acechaban, no era el momento de decaer. Tenía que derrotar al monstruo que tenía enfrente, sin darse cuenta de que vivía en sí y que eso lo complicaba todo.


    "Debo dormir", se dijo a si mismo. "El descanso me despejara la mente", se afirmó. Pero no fue así, no podía descansar pensando en que ella estaba sola, esperándolo en algún lugar distante, y decidió seguir con su aventura viajando hacia el este, a través del gran desierto australiano y guiado solamente por la majestuosa y maravillosa Vía Láctea, le costó mucho llegar pues estaba al otro del mundo pero mereció la pena recorrer todo ese camino en busca de su amada. Emprendió su camino con la convicción de que la encontraría, con la voz de su interior como guía.


    Comenzó a meditar y tras entrar en un trance profundo, pudo verla, estaba allí frente a él y su rostro se iluminó, quería abrazarla,pero algo en su interior le impedía poder hacerlo. Se preguntaba si era un amor no correspondido o si el problema radicaba en otra naturaleza.


    Salio del trance y se convenció de que eso no importaba ahora, algún día estarían juntos, que a pesar de la distancia el amor salvaría todas las dificultades que se presentasen, cavando su propia tumba encontró un antiguo papiro, en él había un mapa con una cruz roja gigante que lo hipnotizo en el profundo mar de los secretos, esos secretos que trató de olvidar y de los que jamás se atrevería a hablar. El mapa hipnótico resulto ser un mapa a un tesoro mágico que estaba custodiado por un dragón enorme que escupía gargajos de lava hedionda plegostiosa, lo cual no hacia más que hacerlo más interesante

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido. Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoíris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos. Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentándolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad. Así comprendió que la amaba y quería vivir muchas aventuras a su lado y se entristeció de no poder hacerlo en ese momento pues había pecado en pensamiento, palabra, obra y omisión. "Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa." pensó.

    Sacudió su cabeza para borrar esos tormentos que lo acechaban, no era el momento de decaer. Tenía que derrotar al monstruo que tenía enfrente, sin darse cuenta de que vivía en sí y que eso lo complicaba todo. "Debo dormir", se dijo a si mismo. "El descanso me despejara la mente", se afirmó.

    Pero no fué así, no podía descansar pensando en que ella estaba sola, esperándolo en algún lugar distante, y decidió seguir con su aventura viajando hacia el este, a través del gran desierto australiano y guiado solamente por la majestuosa y maravillosa Vía Láctea, le costó mucho llegar pues estaba al otro del mundo pero mereció la pena recorrer todo ese camino en busca de su amada. Emprendió su camino con la convicción de que la encontraría, con la voz de su interior como guía.

    Comenzó a meditar y tras entrar en un trance profundo, pudo verla, estaba allí frente a él y su rostro se iluminó, quería abrazarla,pero algo en su interior le impedía poder hacerlo. Se preguntaba si era un amor no correspondido o si el problema radicaba en otra naturaleza

    Salio del trance y se convenció de que eso no importaba ahora, algún día estarían juntos, que a pesar de la distancia el amor salvaría todas las dificultades que se presentasen

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido. Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoíris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos. Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentándolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad. Así comprendió que la amaba y quería vivir muchas aventuras a su lado y se entristeció de no poder hacerlo en ese momento pues había pecado en pensamiento, palabra, obra y omisión. "Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa." pensó.

    Sacudió su cabeza para borrar esos tormentos que lo acechaban, no era el momento de decaer. Tenía que derrotar al monstruo que tenía enfrente, sin darse cuenta de que vivía en sí y que eso lo complicaba todo. "Debo dormir", se dijo a si mismo. "El descanso me despejara la mente", se afirmó.

    Pero no fué así, no podía descansar pensando en que ella estaba sola, esperándolo en algún lugar distante, y decidió seguir con su aventura viajando hacia el este, a través del gran desierto australiano y guiado solamente por la majestuosa y maravillosa Vía Láctea, le costó mucho llegar pues estaba al otro del mundo pero mereció la pena recorrer todo ese camino en busca de su amada. Emprendió su camino con la convicción de que la encontraría, con la voz de su interior como guía.

    Comenzó a meditar y tras entrar en un trance profundo, pudo verla, estaba allí frente a él y su rostro se iluminó, quería abrazarla,pero algo en su interior le impedía poder hacerlo. Se preguntaba si era un amor no correspondido o si el problema radicaba en otra naturaleza

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido. Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoíris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos. Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentándolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad. Así comprendió que la amaba y quería vivir muchas aventuras a su lado y se entristeció de no poder hacerlo en ese momento pues había pecado en pensamiento, palabra, obra y omisión. "Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa." pensó.

    Sacudió su cabeza para borrar esos tormentos que lo acechaban, no era el momento de decaer. Tenía que derrotar al monstruo que tenía enfrente, sin darse cuenta de que vivía en sí y que eso lo complicaba todo. "Debo dormir", se dijo a si mismo. "El descanso me despejara la mente", se afirmó.

    Pero no fué así, no podía descansar pensando en que ella estaba sola, esperándolo en algún lugar distante, y decidió seguir con su aventura viajando hacia el este, a través del gran desierto australiano y guiado solamente por la majestuosa y maravillosa Vía Láctea, le costó mucho llegar pues estaba al otro del mundo pero mereció la pena recorrer todo ese camino en busca de su amada. Emprendió su camino con la convicción de que la encontraría, con la voz de su interior como guía.

    Comenzó a meditar y tras entrar en un trance profundo, pudo verla, estaba allí frente a él y su rostro se iluminó, quería abrazarla, pero algo en su interior le impedia poder hacerlo.

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido. Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoíris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos. Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentándolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad. Así comprendió que la amaba y quería vivir muchas aventuras a su lado y se entristeció de no poder hacerlo en ese momento pues había pecado en pensamiento, palabra, obra y omisión. "Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa." pensó.

    Sacudió su cabeza para borrar esos tormentos que lo acechaban, no era el momento de decaer. Tenía que derrotar al monstruo que tenía enfrente, sin darse cuenta de que vivía en sí y que eso lo complicaba todo. "Debo dormir", se dijo a si mismo. "El descanso me despejara la mente", se afirmó.

    Pero no fué así, no podía descansar pensando en que ella estaba sola, esperándolo en algún lugar distante, y decidió seguir con su aventura viajando hacia el este, a través del gran desierto australiano y guiado solamente por la majestuosa y maravillosa Vía Láctea, le costó mucho llegar pues estaba al otro del mundo pero merecio la pena recorrer todo ese camino

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido. Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoíris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos. Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentándolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad. Así comprendió que la amaba y quería vivir muchas aventuras a su lado y se entristeció de no poder hacerlo en ese momento pues había pecado en pensamiento, palabra, obra y omisión.

    Has borrado lo mio? =(


    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido. Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoíris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos. Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentándolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad. Así comprendió que la amaba y quería vivir muchas aventuras a su lado y se entristeció de no poder hacerlo en ese momento pues había pecado en pensamiento, palabra, obra y omisión. "Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa." pensó.

    Sacudió su cabeza para borrar esos tormentos que lo acechaban, no era el momento de decaer. Tenía que derrotar al monstruo que tenía enfrente, sin darse cuenta de que vivía en sí y que eso lo complicaba todo

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido. Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoiris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos. Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentandolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad. Así comprendió que la amaba y quería vivir muchas aventuras a su lado y se entristeció de no poder hacerlo en ese momento

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero había algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido. Aquella fría y fatídica noche en la cual el tenia insomnio recordó meterse en una cueva que tenia esmeraldas incrustadas en las grietas y el reflejo de la luz hacía muchos arcoiris con gamas de colores jamas vistos, mas permaneció sereno e impasible inmerso en sus pensamientos. Pensaba solo en ella y en el monstruo que latía en su interior atormentandolo cada día por no haberla seguido cuando tuvo la oportunidad.

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían. Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sinfonía. Pero hubo un día, que eso cambió. Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mil" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en las ruinas de Palmira Siria, pero se le olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros, fiel a sus creencias imagino que el destino la volvería a cruzar con ella pero encontró a su admirable y entrañable voz interna que le decía "baja esas escaleras, ella de estará allí" , y no estaba.Pero habia algo que le daba esperanzas, pues encontró una de sus pulseras favoritas, que se había desprendido

    Hace mucho mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana

    Dos personas caminaban por un parque, ellos se conocían, se hablaban con la mirada, se decían...

    Cosas que esperaban decirse el uno al otro, hasta el punto de que cada uno completaba la frase del otro, en una perfecta sintonía. Pero hubo un dia, que eso cambió...


    Pues ella le dijo algo que el no pensara que le diría: "Te amo 3 mill" y rápidamente se fue corriendo, el no entendió. Al día siguiente volvió al parque con la esperanza de volver a verla, pero no la encontró, le preguntó a un amigo, allí se enteró que se fue a recorrer el mundo sin el. El pensó: "que raro que se fue sin mi", ese mismo día empaco una mochila y compro un boleto de avión para buscarla en... las ruinas de Palmira Siria, pero se le...olvido ponerse la alarma del móvil, se quedó dormido y acabó en Australia rodeado de canguros....